Presentación. Quién es el autor ?

Pepe Sacapuntas es un voyeur irreverente de la realidad. Muchos de sus trabajos , por decir de algún modo, han sido publicados en Montevideo.com y en el semanario el Pueblo de Santa Lucía donde es soportado en la actualidad. Podemos citar varias publicaciones que definen en forma perfecta a este mercenario de las letras; " La ironía y la transgresión campean en sus trabajos " Diario Clarinete de Salsipuedes; " Al leer sus notas se justifica el delito de opinión." El País de Palo Solo; " Excomulgado para siempre " Semanario Lavatutti del Vaticano, sólo por destacar las mejores opiniones. Lo cierto es que este libre pensador abre una ventana transgresora de ficción que supera la realidad, incluida la política, de allí su relativo éxito. Lo invitamos a descubrir a este personaje bajo su entera responsabilidad.

domingo, 24 de septiembre de 2023

 

Romaneadas.

Dedicado al Toto Paniagua y al Profesor. 


Recién llegado de Roma, y ya contratado para dar mis primeras impresiones. Es lo que pasa cuando uno es figura. Les cuento que fui invitado a esa  gran ciudad, por gentileza de mi amigo de infancia; Vitito Corleone IV.

Como estuve unos quince días, en Tanolandia, tengo terrible información, pero antes de publicarla la voy a chequear con mi compadre,  el Gordo Billetera que la sabe “lunga”. Por eso lo cité al Boliche Quita Penas. Tendré que bancar una picada pero vale la pena. Ya lo verán. 

-Hola Pepe! me enteré que estabas e Roma en lo de Vitito, el malandro que jugaba contigo al baby fútbol en el Intermezzo Pocitos. El mismo que  le mandaba  la “pesada” a los padres de vuestros rivales,  para que sus hijos echaran para atrás cuando los enfrentaban.

-Todas calumnias, Gordo. Los pequeños episodios se acrecientan con el paso del reloj. En realidad,  no lo pude ver porque justo estaba…

-Preso. Como siempre. Pero vayamos al grano. ¿Dónde te alojaste?

-En una zona de peluqueros que se llama Barberini. Los edificios eran medio viejardos  y como adornados de más …

-¡No seas animal, Pepe! Estabas en el corazón de Trevi, una zona top. La familia Barberini es una de las más poderosas de Roma desde el siglo XVII, y fueron mecenas de lo que se conoce como la Roma barroca, justamente el estilo de arquitectura que vos llamás “adornados de más”. Me imagino que te fuiste directo a la fuente de Trevi por la Vía del Lavatore.

-¡Más bien! pero no estuve mucho rato porque estaban haciendo una colecta. La gente tiraba monedas al agua. Se ve que las finanzas de los tanos andan medio justinianas, y yo que estaba un poco  escaso de “níqueles”, tenía miedo que me impusieran una donación.

-Bueno, en realidad te diría que la gente tira monedas al agua como señal de buena suerte y para volver a Roma, según dice la leyenda. O sea que  en tus términos malevos, no es un mangazo. La fuente fue construida por el gran arquitecto Salvi  y demoró como treinta años, allá lejos,  por el mil setecientos y pico.  Cierro mis ojos y puedo ver ¡esas gradas que descienden hasta el agua como remojándose! ¡esa concepción de una plaza enorme entre pequeñas calles!, con el imponente Dios Neptuno que se alza en la vigilia de la intersección de las tres vías…

-Sí, claro. Era lo que yo te decía, pero por las dudas te estoy sacando apuntes. De allí a puro inglés, mientras caminaba, fui preguntando a la masa, porque tenía la data de un panteoncito ubicado en  la zona. Pero los tanos en general no hablan muy bien mi segunda lengua.  Por suerte encontré uno más letrado que me dijo: “ Estás a unas cuadras ¡boludo! Agarrá por esta calle que te revienta los ojos, cruzás la Vía del Corso y llegás al toque, uruguayo “.

Llegué al supuesto lugar, pero no vi ningún cementerio, ni panteón ni nada, solo había un edificio grande, pero   bien grandote con brutas columnas. Se ve que fue un hospital porque el frente se leía algo como “ Agripa” que debe ser gripe en latín.

-Te voy a dar dos noticias, Pepe. La primera, es que conociste el Panteón que tiene cerca de dos mil años, que no es otro que ese edificio “grandote”.  Una joya del imperio romano, un templo donde todavía se celebran misas ocasionales. La cúpula es única, es la más grande que se conoce en hormigón no armado, y justamente quien la hizo fue Marco Vipsanio Agripa- esa sería la segunda- que es lo que vos tan bien interpretaste como una enfermedad…Allí está enterrado el rey Vittorio Emanuelle el  prócer  de la Italia moderna. Pero sigamos ¿fuiste al Vaticano?

-¡Más bien, gordo! ¿pensas que soy un inculto? Ese lugar, sí que me gustó. Iba a ir con el short de Peñarol pero me dijeron que no te dejan entrar liviano de equipaje. Seguramente porque si hay que desnudarse siempre vas a encontrar algún cura especialista en la materia ¡jaja! 

- No se te ocurra poner ese chiste de cuarta en tu nota, porque te van a volver a excomulgar. ¿Y qué destacas de tu periplo?

En la iglesia de San Pedro, sobre  la derecha, había una linda estatua. La gente se apiñaba como en la cola de la Ámsterdam, creo que era toda de mármol, escupida por un tal Miguel Ángel, ese sí que era peluquero ¡Porqué no me vas a discutir que  tiene un nombre que le calza justo!

-Stop. No fue escupida, sino esculpida. Lo que te impactó, es una de las obras cumbres de Miguel Angel  Buonarotti , escultor, arquitecto, pintor, tal vez el más grande artista de todos los tiempos o al menos del renacimiento. Es una de las tres Piedades que hizo, una de ellas está en Florencia y no está terminada. Pero yendo al grano, la que vos viste está en la capilla del crucifijo en la Iglesia de San Pedro. Fue una creación revolucionaria de un joven Michelangelo, que la hizo desde una sola pieza de mármol.

Para empezar, la virgen María que es la protagonista de esta obra, es muy joven, más que su hijo Jesús, que aparece en una dimensión más pequeña casi en un segundo plano, con un rostro que no denota el sufrimiento de la crucifixión.  Pero pasemos a lo popular ¿fuiste al Coliseo?

-¡Obvio, gilastro! Te aclaro que no es un Coliceo tipo el Dámaso. No fue hecho para estudiar, sino para fajarse “palo a palo” como la película Espartaco. Esa que mirábamos de niños,  en la Matiné del cine Arizona, donde nos echaban todos los domingos de tarde,  por armar quilombo. No  sé muy bien a qué se debe el nombre, lo que sí noté,  es que está más deteriorado que el Estadio Centenario. A ver vos, sabelotodo, ¿me podrías aclarar esa duda?

-Veo que en este tema está más orientado. Es cierto que está más deteriorado que nuestro Estadio, por la sencilla razón que tiene cerca de dos mil años.  Coliseo viene de coloso. En su construcción original que no era para combates de gladiadores había una estatua gigante de Nerón. La estatua colosal fue destruida, pero dejó la marca para el nombre ulterior. Esta joya de la arquitectura que pudo albergar a cincuenta mil personas ,fue un regalo del emperador Vespasiano al pueblo romano, y es otro ícono de la cultura Romana. Después si fue utilizado como una arena de gladiadores por aquella máxima política  de "Pan y circo" concepción del arte de gobernar al pueblo  que ha perdurado hasta nuestros días. Como nota al pie, al que echaban del cine Arizona era a vos y a tu barra de infanto juveniles por motivos irrepetibles.

- Te admiro, Gordo ¡sos una biblia!  Ahora te quiero decir que la comida que más me gustó fue…

-¡Espagueti  con salsa de ragú.!  Una suerte de estofado que si sabés porque se llama así, doy por terminada esta charla

-¡Tal cual! La mejor comida. Con razón somos amigos…¡si tenemos los mismos gustos y hasta  la misma cultura.! Y te aclaro que ragú viene del francés, “Ragouter”  que es abrir el apetito. Eso me lo contó un amigo francés  que me hice en Roma, un  tal Pierre  que me presentó unas minas que…