Presentación. Quién es el autor ?

Pepe Sacapuntas es un voyeur irreverente de la realidad. Muchos de sus trabajos , por decir de algún modo, han sido publicados en Montevideo.com y en el semanario el Pueblo de Santa Lucía donde es soportado en la actualidad. Podemos citar varias publicaciones que definen en forma perfecta a este mercenario de las letras; " La ironía y la transgresión campean en sus trabajos " Diario Clarinete de Salsipuedes; " Al leer sus notas se justifica el delito de opinión." El País de Palo Solo; " Excomulgado para siempre " Semanario Lavatutti del Vaticano, sólo por destacar las mejores opiniones. Lo cierto es que este libre pensador abre una ventana transgresora de ficción que supera la realidad, incluida la política, de allí su relativo éxito. Lo invitamos a descubrir a este personaje bajo su entera responsabilidad.

miércoles, 30 de agosto de 2017

Cristalindo

                                                   

                                                       

                                                       

-Hola Cris! Tanto tiempo sin saber nada de vos. ¿Qué estabas ofendida? Por aquell..sí pero no me grit..Sí Cris, es cierto pero estaba medio copeteado, ¿qué querés?  


-Sos un anormal, Pepe. No te voy a perdonar jamás  ese chiste que hiciste cuando en campaña para las PASO del mes pasado, preguntaste a los dirigentes del partido ¿Qué diferencia hay entre un delincuente serial y un intendente peronista?


-¿Quién no va a saber? Que el primero va preso… ¡y al segundo… lo reeligen!  Cris.


-Bad information, Pepe, bad information. Mira, querido; ésta es  tu última oportunidad. Necesito que me escribas una oratoria  de campaña porque tengo mis asesores presos por narcotráfico, lavado de  dinero, sobreprecio de obra pública, y otros tipos de persecución política. Quiero un discurso inclusivo, moderno, desgarrador, combativo y  que pegue fuerte. En octubre tengo que arrasar. Ponete la camiseta y hacé como tu compatriota Víctor Hugo, que me apoya ciegamente.


-Cris;  Víctor Hugo, y Lucho Avilés no son uruguayos, nacieron en Chubut, son argentinos. Uruguayos son: Gardel, Borges y Favaloro. Todos oriundos de Tacuarembó.


-Pero dejate de boludeces, nene. Usá  esa neurona para algo que no sea decadente ¿Entendiste? Como uruguayo que sos, no me hagas recordar al Pasteur del Pantanoso ni a tu tocayo; el filósofo  guerrillero  que me trató de vieja. ¿Tomaste nota, aprendiz de periodista del grupo Clarín?


-No sé, Cris. Estoy con mucho trabajo. Ah… me vas a pag.., y me mandas dos lucas en un bolso, como la última vez. Bueno, pero que quede claro que es solo por cuestiones de amistad.


Y me colgó. Eso fue hace unos días atrás. Creo que pude armarle algo genial. Por suerte estoy con mi amiga La Cacho que me va a oficiar de público.

-Cacho, a ver ¿qué te parece esta pieza oratoria? Traeme el cajón de las botellas de whisky para pararme como si fuera un estrado. Ok, gracias y prende las orejas.


-“Compañeros, compañeras, intendentes, intendentas, concejales, concejalas, delincuentes, delincuentas, colectivo gay y colectivo a Fuerte Apache, dirigentes y dirigentas sindicales y sindicalas, queridos todas, toditos y todos:

Hemos aceptado este desafío electoral, no para obtener una banca al Senado  que  nos permita evadir el llamado de la justicia penal. Eso es una estupidez de la derecha imperialista ordinaria y cavernícola.

Hoy regresamos al ruedo porque la gente nos lo exige. Habíamos logrado terminar con la pobreza, la desocupación y la inflación de una forma científica y contundente; eliminamos los índices de medición y chau. Éramos Alemania hasta que esta gente insensible tomó las riendas del país aplicando un brutal tarifazo que está poniendo en juego el veraneo de miles de compatriotas que no podrán ir a Miami y no tendrán más remedio que visitar las playitas del otro lado del charco.

Debemos poner un límite a esta oligarquía corporativa y  a la corrupción que está inundando nuestro país. Y, ¿quién sino yo, es la que tiene más experiencia en estos temas? Podría hablarles horas pero la modernidad nos exige ser concretos y contundentes.

Por eso, con el permiso de Tita Merello, les voy a cantar lo que siento. Para Uds.  mi pueblo querido... ¡Música maestro!


Se dice de mí

Se dice de mí

Se dice que yo lavo

Que me quedo con el vuelto

Que soy dura  y no  me muevo

Que soy medio populista

Aunque me sobran modistas

Mi presencia es algo ruda 

Mis procesos no me ayudan

            Pero yo gano… de acá a la luna.


Si zurda soy, pongámosle

Que de eso aún no me enteré

            Y en comité,  yo solo sé

Que a más de un gil, dejé de a pie

Podrán putear, podrán llorar

Y maldecir  o rebuznar

            Pero el votito que usted  me dio

Mucho Mauricio  me lo envidió

Y no dirán que lo engrupí

Porque un avión  yo siempre  fui

       ¡Yo soy así!


Cae el telón, aplausos, desenfreno, cartas documentos por doquier, papelitos y te sacan en andas con la marcha peronista a todo volumen.

  

Nota; Cris,  si no te acordás  de la tonada de “Se Dice de Mi”, la  googleas en  YouTube con solo poner la canción y Tita Merello. 

-Cacho, atendé el teléfono que debe ser Cris.

¿Aló? Si, Cris, lo terminé. Me dio un trabajo brutal, mi amor.  Me pasé como tres siestas sin  dormir, querida.  Qué ¿cómo quedó? Ta lindo, Cris,¨ta lindo.

miércoles, 16 de agosto de 2017

Una murga de etiqueta.

                                               
-Mirá  pibe,  nos pediste que vayamos armando un material  para la murga que vas a sacar el próximo carnaval. Por cierto, para satisfacer tu pedido con el gordo Billetera, que es un viejo carnavalero, hemos estado trabajando con perdón de la palabra. 
Para empezar,  tenés que tener claro que la murga como tal tiene un origen español, más precisamente de Cádiz, con un fuerte componente de la zarzuela. Fue una compañía de ese género allá por el mil novecientos  y poco que se llamaba La Gaditana que recaló en Montevideo. Algunos de sus integrantes salían a reírse de su propio espectáculo, o sea a murguear,  en un montaje de  sátira callejera y al final  pasaban “la gorra”.  O sea, no te podés olvidar que  la murga en su esencia, es una teatralización cantada, un arte escénico, si se hace con dignidad.

-Es así, asintió el Gordo. Además te adelanto que  con Pepe tenemos nuestra impronta de letristas. La murga compañera, no va. Para alcahuetear están los Ministros. Es imperativo   criticar todo, con humor y actualidad, sin miopía ideológica. Primero, tenés que encarar una presentación coral que evoque el regreso al tablado.

-¿Entendés, aprendiz de brujo? Algo como, la recherche du temps perdu, diría mi querida compañera de colegio Karin, parafraseando a Proust. Al Gordo y a mi, nos gusta la rima lineal y no salteada porque facilita el canto coral. Por tanto, la presentación debería ser algo como….

                         Gorrión de mis fantasías, hoy te libero en mi canto.
                         Viejos murmullos  de viento,  que se han acallado un tanto.
                         Acordes  de poesía que reiteran  su  prestancia,
                         retornan a este escenario, con sus  recuerdos de infancia.
                         Es tu murga que regresa! a  desvestir   tus silencios,
                          y  a evocar tus alegrías, burlándose de los tiempos.

 -Después de la presentación viene la parte que más le gusta a Pepe que es un cupletero de la vida. Acá si  no hacés reir, cagaste, diría Bécquer. El coro hace una suerte de narración con visos de seriedad, pero el final  es del bufón. Para hacértelo fácil te diferenciaremos lo que canta el coro  del texto  del cupletero. Además, vamos a estirar las letras, así ves  cómo se debe entonar para el “remate”. Apuntá:

CORO.
Me dolía la barriga, estaba desesperado.
Ingresé en una farmacia con cara de preocupado.
Ahí “mesmito” pegué un grito con una voz medio insana:
“preciso una solución que me cure esta escapada”
                        
                        CUPLETERO.
-No se preocupe Señor, me comentó la empleaaaada….
y me encajó cinco porros….,¡para toda la semana!

-¿Viste cómo es botija? Por si no cazaste la esencia del cuplé que te explicaba el Gordo, acá te va la yapa.                             
CORO.
                        Anótese compañero, nuestra visión progresista,
                        es pa´ toda la gilada, que anda corta de vista.       
                        El licenciado Raulito, lo dijo  con inflexión,
                        la  izquierda de nuestro mundo, no acepta la corrupción.
                        
                        CUPLETRO.
                        Mirando la realidad, con observación estreeecha…
                        Me parece que por casa….¡gobierna la ultraderecha!

-¿Te va quedando claro? Y el final es lo que se llama la retirada. Debe tener una cierta reminiscencia  cuasi tanguera. Es de estilo un recitado al inicio, el  que se reitera al final, y debe sonar  así:
                        
                         RECITADO:
                         Se van, como aquellos furtivos amores de barrio.
                         Se van, los de las caras pintadas de afecto,
                         serpenteando en tu presencia, un camino de emoción.
                         (el Director da la nota; un, dó, tré…)                
                         
                         CORO:
                         Cuáles  gotas de garúa que se escapan de la vida,
                         este coro se despide en la forma más sentida.
                         Si logramos evocar, tus nostalgias más preciadas,
                         nos damos por satisfechos, de la forma acostumbrada.
                         Es que esta murga mi amigo, es socia de tu cariño,
                         como cometa de sueños, remontada por un niño.

-Por este trabajo ¿qué te vamos a cobrar? Ya te advertimos que somos caros, pero los mejores. Por tanto, mínimo una botellita de  etiqueta negra, ¿no es cierto Gordo?

-¡Tal cual, Pepe! Una Yoni de las de verdad, y la tomamos a marcha camión.                   

sábado, 12 de agosto de 2017

De Nada.

                                   
                            
                      Estaba en la playa, oteaba el mar y era casi una ola más, cuando en la lontananza   siento  una voz femenina  que creí identificar como de esposa de  amigo que me interpela:
                                        --Che, ¡te estoy hablando!   Reservé hora para ir a cenar a las  10 de la noche, sé que es temprano y que no te gusta pero no jodas …si no estás haciendo nada.
La furia me acometió. Minutos de dedicación mental extrema perdidos en la banalidad. Iba a contestar  lo incontestable pero le dije a la impostora:
                                        --Te voy a explicar a vos y a todo el género femenino que es la nada.
                      Y  en eso estoy. 
                      No tengo duda que los hombres que lean estas líneas asentirán  con pundonor sin lugar a dudas.No esperen leer cosas mundanas o risueñas. Este es un artículo  serio, fundado en años de meditación tántrica experta.
                      Por eso apreciados  lectores al acometer mis reflexiones , imaginen que Uds. son la sociedad de científicos que recibe al Galileo del ocio.
                      Queridas “todas”; lo primero que deben saber es que “La Nada” tiene dos acepciones. La femenina que es algo como “dícese de la conducta de  mujer que no está realizando ninguna actividad” y la masculina : que se define como  “conducta de alto estado mental al que llega el hombre luego de años de meditación trascendental”.
                      Por tanto, la Nada en el hombre es una actividad de peso singular.  De un tamaño  equitativo al “Shopping” en la cultura de Uds. , queridas Evas, para que  entiendan y respetan en toda su dimensión lo que supone la Nada para nuestro género.Existen elementos importantes colaterales que ayudan a lograr ese estado mental. El más preciado;  el control remoto ,  claramente una extensión del pene.
                        Esta aseveración es tan cierta como que  no hay controles remotos con forma de vagina.  Asúmanlo de una vez;   el control remoto  objeto fálico vedado a las mujeres si hay un hombre cercano,  sirve para cambiar canales sin ton ni son a escasos centésimos de segundos  de cada pulsación con el único fin masculino  de llegar….. a la Nada.
                        Por ello es muy común ver a un hombre cambiando canales, con los ojos blancos, mirando sin mirar la tele que al ser interrogado por su esposa al grito de; 
                           - Pero decime ¡ qué carajo estás haciendo!!!, le responda en forma medio ida y hasta tímidamente…  “Nada”.
                        En los primeros dos meses de casados además de Nada se cuela el término cariño como pidiendo disculpas por tal conducta.Es de acotar que los iniciáticos precisan de una cerveza bien fría además del control para alcanzar la Nada.
                         En mi caso, años de ocio bien conjugados me han convertido y déjenme presumir ..en un maestre grado 33 de la Masonería de la  Nada.
                         Puedo alcanzar ese “chakra” de intensidad mental  en una conversación colateral de playa femenina del tipo ; “peinados temporada 2017”, “vestidos de verano  que no me quedan bien porque estoy muy culona”,”   o más de academia  como “ la consolidación fiscal” o  “ sensación térmica de inseguridad” dictada por las  autoridades vernáculas.
                         A la Nada se llega luego de años de rigurosa  abstracción mental por lo que es un imperativo respetar a  los que profesamos esa filosofía del saber milenaria y no menospreciar y/ o profanar  nuestro estado de abstracción.
                         Por ello queridas amigas cuando vean a su esposo o compañero  perdido en la mirada, con o sin control remoto, pero claramente haciendo Nada, no lo interrumpan. Aguarden que ese estado mental transcurra para  luego sí cargarlo de actividades  tan trascendentes cómo; “si pasas por la Barra trae el  bolso que me dejé en Portezuelo  en lo de mi hermana “ o  “andá a buscar a mamá  “Acanomás” a la estación de bus”.
                         A mis lectores masculinos les aclaro que “El Acanomás”  es una medida de distancia femenina entre dieciséis y treinta y dos km según la carta astral de la doña que lo invoca, pero  su desarrollo y proyección daría para otro artículo.

                         Ahora los dejo porque; ¡ adivinen lo que me voy a hacer! .. y sin control remoto….

domingo, 6 de agosto de 2017

Vuele bajo.

                                               

Estábamos con un grupete de amigos reunidos, en un asado bien regado, cuando me quedé profundamente dormido en una reposera, ubicada debajo de un gomero. No puedo decir si fue un sueño o una experiencia del más allá. Lo cierto que un tipo grandote y barbudo, de patillas gruesas al estilo de la década de los setenta, con un abundante entretejido de la “époque”, se  apareció de golpe para decirme:
-Periodista de cuarta, despertate y  poné atención a lo que te voy a decir porque sino vas a ser boleta.
 Quise levantarme pero con sólo sentir la fuerza de su brazo derecho sobre mi hombro, me convencí que lo  mejor era abrir bien las orejas y no intentar nada.
 -Quiero que le cuentes a los lectores de tu país que son unos cornudos por decirlo en forma elegante. Cuando yo era un niño en Clichy,   leía historias en el Río de la Plata sobre  famoso el anarquismo expropiador. Españoles, italianos y otros europeos que se fugaban del hambre y del la expoliación burguesa   habían adoptado una modalidad un tanto peculiar,  tanto que  se dedicaban a  “expropiar” a los bancos.
-Así es señor, mi tío abuelo me contó más de una vez el asalto del cambio Messina  en el año  1928 que realizaron unos anarquistas españoles en el que murieron varias personas. Pero debo decirle que detrás de cierta aura de romanticismo, estos tipos  eran muy sanguinarios  y su motivación bastante dudosa. A propósito me puede decir ¿con quién tengo  el gusto de escuchar?
-No te hagas el payaso que te puedo romper todo. Me llamo Jacques Mesrine, fui considerado el enemigo público número uno de Francia en la década del setenta del  siglo pasado. Asaltaba bancos, secuestraba millonarios, robaba casas suntuosas no solo en mi país sino en Canadá, Estados Unidos y otros lares.
-Una joyita, con su permiso. Conozco algo de su peculiar historia, además le gustaba dar notas en los diarios y revistas mientras tenía a toda la policía de Francia en sus talones. Ello sin contar que escribió un libro sobre  sus actos delictivos, y algunos asesinatos. Recuerdo que en un momento pretendió justificar sus andanzas como un revolucionario que venía a destruir el orden burgués.
        -Veo que pese a que la policía de Francia me acribilló a balazos en 1979, todavía sigo vivo.  Pero volviendo al tema que me tiene mal, no comprendo cómo en Uruguay Uds. permiten que la red bancaria se haya convertido en un verdadero expropiador de sus ahorros con la complicidad de todo el aparato político.
        -Señor Mesrine, ¿puede ser más específico? Me interesa el tema.
        -Más que detalles te voy a contar la “hermosa” ley de intermediación financiera que han creado en tu país los buenos para nada más, que no sea empalarlos. Los pagos de los sueldos, los honorarios de los profesionales, las nuevas jubilaciones, pensiones alimenticias, todo, absolutamente todo, no lo van a poder cobrar más directamente. Y ello no  es una opción para el buen ciudadano, es “de pesado”, te guste o no. O sea; la platita  primero va a pasar por la red bancaria para que Gran Hermano sepa hasta el color de los calzoncillos que Uds. usan.
        -Y supongo que por esas módicas sumas manejadas a costillas  de Juan Pueblo , la banca no nos va a dar un carajo, sumado a que tampoco podremos disponer por día otro dinero que no sea el que autoriza cada banco, le acoté a este gánster que ya me caía algo mejor.
        -¡Por supuesto!  Todo sumado a que te podes encontrar que los cajeros automáticos están vacíos en los fines de semana largos.  Ni sueñes con que te van a atender mejor…hay bancos que cuando vas a depositar en el cajero, lo cierran un ratito (de veinte a treinta minutos) mientras procesan los depósitos, y la gilada parada esperando. ¡Una joyita, Pepe! Tu plata, fruto de tu  yugo no es más tuya, sino de ellos.
        - Lo parió. 
        La verdad que este tipo con un aire del Jean Paul Belmondo de  la película ”A bout de soufle” me desacomodó. Le iba a contestar cuando sentí como una especie de tortazo y la voz inconfundible del Gordo Billetera que me decía:
        -¡Bo, salame!, el Turco Gandul ya hizo la cuenta; son trescientos setenta y cuatro  pesos por barba, todo incluido.
        Como corresponde, metí la mano en el bosillo y cuando estaba contando la guita, el Gordo Billetera me atajó:
        -¿Qué hacés? ¿Tas loco? Ni se te ocurra darnos la plata. Apuntá bien; Banco Iteafano, Caja de Ahorro Sucursal El Ensarte, Número 00 911  007. Cuando el cajero te ponga  el concepto, ni se te ocurra mentir. No vayas a poner “otros”, porque te mandan la DGI.
        Y fue allí, en el fragor de la  insania de los tiempos que corren, cuando recordé la poesía del enorme Facundo Cabral, en su fraseo de la canción “Vuele bajo”:                                                                  “No crezca mi niño, no crezca jamás
                       Los grandes al mundo le hacen mucho mal
                       El hombre ambiciona cada día  más

                       Y pierde el camino por querer volar”

sábado, 5 de agosto de 2017

La Descriminacion



LA DESCRIMINACION.


Por Pepe Sacapuntas.




- Agüelo que quiere decir “descriminar”

- Mire m´hijo . Le voy a contar un cuento real así lo entiende

mejor. Hace unos quince años en nuestro pueblo “La Adversidá” se hizo flor de tablao en carnaval. Estaba yeno, pero yeno de gente. Al final de la actuación de la murga “Los Empiojaos” se hacía como siempre la elección de la reina.

- Me imagino tatita que la presidente del jurao era la estanciera

Carlota Anchorena de Los Patricios.

- Efectivamente. Pero el problema jue que La Cacho, El Mirto,La

Yeila y otros más quisieron hacer la elección de la reina de los maricones. Ahí mesmito coparon el tablao. Cuando el comesario Maloni vio la cara de las cajetillas de la comisión de damas dijo en forma elocuente y elegante : “Bájense todos del tablao, manga de trolos de mierda”.


Sucede que el Mirto es trolo pero antes era flor de puntero derecho, y estaba acostumbrao a la piñata y a recibir insultos de la tribuna, por eso reaccionó; lo reputeó a Maloni y a todas las refinadas de la comisión. Tras cartón se armó flor de kilombo, volaban botellas, gargajos y hasta una bombacha negra; carculo que de viuda necesitada. El ex puntero, luego de ser calaboceado, marchó pa´ la capital del Departamento. Asigún dicen el Mirto fue medio novia del Edil Garquetti cuando este era masajista de la selección departamental , y consiguió que le habilitaran una marcha en el pueblo , pa´ desagraviar, que se llamó del “Orguyo Guey”.



Las malas lenguas cuentan que le metió presión al edil con contar en el semanario “El Eco” los masajes que le hacía de joven a él y a varios cuello duro que ahora toman Güisky importao.


- ¿Qué es eso de “Orguyo Guey” ?

- Ta clavao botija; es una marcha pa´ protestar con orguyo, a lo
guey.
El primer año estaban los trolos de siempre y alguna de las chicas de
la whiskería “Legendarias del Camino”. Serían doce o trece, no más. Una de las hermanas Garrapiñada se avivó y puso un puesto al final del pueblo, en la segunda cuadra de la principal y vendió setenta y dos tortafritas con el mismo aceite. Un lujo.

Los trolos habían conseguido una carreta agujereada y la tiraba el

burrito “Taburete” del gallego Manolo que se los alquiló para la ocasión. La procesión guey iba con un grabador a todo volumen todos bailando de cadera, tres adentro y diez al costado del carruaje, una canción que decía “ Resistiré, resistiré”.
Se habían arreglao como para fiesta. La Cacho como no tenía medias
finas se puso la red de pin-pon del Club “El Malandraje” que le emprestó el presidente de esa época, el turco Gandul, El Mirto se puso un yort apretao de nalga, de beibi Fulbo, La Yeila se depiló de la rodilla para abajo y se encajó una minifalda de tela de arpiyera . Además todos los de la marcha se pintaban los labios con rojo bien enjetao, pa´ provocar y daban besitos al aire.
- ¿Y usted fue agüelo ?
- El primer año la relojié de lejos a la marcha como todo el
pueblo. El segundo ya metí un carro de chorizos de hilo rojo a veinticinco la unidá y de hilo azul a veinte.
- ¿Y cuál era la diferiencia?
- ¡El hilo m´hijo! Por eso los de hilo rojo son más caros. Anduve especial ese año, los vendí todos.
Risulta que en los años que siguieron la marcha era cada vez más grande. Empezaron a venir trolos desfiladores y mucha paisanada de los pueblos vecinos. En lugar de carretas, favores mediante, los guey consiguieron camiones y les ponían letreros como “ Por atrás no es delito” “ Pete cien peso al final del desfile” “ Soy Yeni y te hago una promo” y cosas así.
El tumulto que vino para la última marcha era como de doscientos.
No quedó nadie en los pueblos de la vuelta; ni el loro, botija. La Comisión de la marcha consiguió hasta un organizador de eventos, un tal Juan Luis Espadachín, que contrataba payadores, cantores, organizaba juegos de taba y hasta armó una kermesse al final del día.
La Mirto en la última marcha tenía un puesto de pelucas y con la
Cacho habían dejao rabones a todos los caballos de veinte leguas a la redonda . Cuando les preguntaban cómo habían conseguido tantas crines, decían por lo bajo que conseguir materia prima no era robar... que para eso están los bancos. Dispués pintaban las pelambres de rosao, naranja, meta colores chillones que a la gente le encantaban para hacer el “cotiyon” o algo así que no que qué carajo es, pero se las pagaban muy bien.

- ¿Y porqués no se hace más la fiesta agúelo?

- Pasó lo de siempre m´hijo. El pueblo “La prosperidá” vio la
Cantidad de gente más la plata que se movía con la marcha y arreglaron con los políticos de la capital departamental. Por eso ahora se hace allá, en esa villa de acomodaos. ¿Se acuerda que juimos hace un par de años? Ellos la hacen con sus maricones y otros que traen hasta ….¡ de Montevideo! Contratan grupos de música de otros pagos y algunos hasta cantan en inglés. La marcha la organiza un banco español y una bebida cola de los gringos, tienen carros alegóricos con luces…, en fin; el progreso que se le dice.

- Ya entendí Tata. Entonces descriminar es que si sos pobre te

roban hasta las ideas.
- Algo así m´hijo, algo así.



martes, 1 de agosto de 2017

A puro verso

Noche polar en el boliche “Legendarias del Camino”. Se había juntado un malón con la certeza de que podían salir de las casas  sin drama, porque los dos chorros del pueblo La Adversidá, estaban engripados.

Para que tengan una idea del frío que hacía, sepan que La Mirto colgaba las botellas de cerveza en la higuera del patio trasero  del boliche y había que entrarlas en menos de diez minutos porque sino explotaban.
Una estufa bien cargada de leña, donación no oficial de Doña Carlota De Los Patricios, cobijaba  la reunión. Las mujeres siempre con la cola pegada al fuego, vaya uno a saber por qué.

Cuando el alcohol venía campeando, arrancó Exagerado Fernández con su proseo.
-Una  vuelta juimos de pesca con El Piraña López al monte del Infierno, y cuando armamos las líneas, me di cuenta que no teníamos carnada. Buscamos por todo el lugar y no conseguimos nada. De repente veo que El Piraña tenía algo que le sobresalía en la solapa. Una cosa cuadradita, como una insignia. Y me iluminé.
-Decíme Piraña, ¿vos el domingo comiste pasta?
-Ajá. Una raviolada de carne de golondrina especial.
-Ahí mesmito le manotié el raviol de la solapa y tiramos el aparejo bien encarnao. Dos horas dispués juimos a revisar la pesca y sacamos tres tarariras. Una chica, una mediana que se había comido a la primera, y una grandota que se masticó a las otras dos. Y lo mejor de todo… el raviol estaba en la panza de la tercera. Si no me creen pregúntenle al  Piraña.

Pese a que el Piraña se había muerto hacía ya  dos años, la historia pegó fuerte en la tenida. Murmullos de aprobación se cruzaban cuando Bolazo Reyes copó la parada.
-Poca cosa ese cuentito, che. En ese mesmito monte, hace un año,  me quedé acampando una vuelta y me ganó la noche. Estaba casi dormido cuando un olor a azufre me sobresaltó. Sentí unos gruñidos, y dentre los montes apareció una figura de mandinga. Era el Lobizón Pérez que se me venía a los bifes.
Una ola de miedo recorrió el salón. Gumersindo Pérez de profesión tornero, había sido el novio oficial de la menor de las hermanas Garrapiñada. Según cuenta la leyenda, una noche cuando fue a buscar a su novia, cómo no la encontraba en el comedor de la casa, ingresó a su cuarto….Y fue allí que vio salir por la ventana al propio Bolazo quien en calzoncillos gritaba: “¡Mirá que sólo somos amigos!”.
Nunca más se lo vio a Gumersindo en La Adversidá. Las viejas chusmas decían que como la Garrapiñada lo había engañado con siete hombres distintos en la última semana, Gumersindo se había transformado en lobizón.
-¿Y cómo supo que el lobizón era Gumersindo Pérez?, le preguntó el Diente Silva, medio desconfiado, a Bolazo Reyes.
-Si bien era todo peludo, en la cara tenía el mesmo bigotito que el Gumersindo. Por si juera poco era igual de tuerto y también usaba un ojo de vidrio con los colores de Peñarol.
Frente a esos argumentos, se escucharon voces de  miedo y admiración  tipo: “¡Tremebundo!”, “¡Calamitante!”, “ ¡A la maula!” y … “¡Ancap!” acotó el Diente al que no se ocurría ninguna palabra que definiera mejor el desastre. Luego de ese corte de la platea,  Bolazo reacomodó la prosa.
-Vi por la mirada del lobizón que era cuestión de segundos para que me atacara. La bestia gruñía y estaba entuito erizao. Yo,  estaba recién salido de la carpa y  todavía hincado. Y  en ese instante… reaccioné. Manotié del bolso azul la bombacha cavada de La Garrapiñada que se había dejao olvidada en casa. Me arrastré por el suelo y  me puse detrás de una pala que estaba clavada ahí nomás. Luego, bien arrodillao, estiré de costao más de un metro, la bombacha de La Garrapiñada hasta que formé una cruz. Me ricordé del tema de la Princesita Karina y mirando fijo al Lobizón le canté;
-¡Juera!, ¡Juera de mi vida, Juera!  Y no sé si fue por la cruz, porque no le gustaba la tropical, o por el olor de la bombacha, que el Lobizón Pérez pegó terrible salto por encima mío y se perdió en la oscuridad.

La gente  estaba en un estado de paroxismo frenético comentando este fenomenal relato. La Mirto se dio cuenta que del miedo de esta aparición,  los pelos de las piernas le habían traspasado las medias can-can. Para disimular, se levantó y se puso a escuchar la radio  galena que estaba al costado de la barra. Y de repente pegó el grito:
-¡Cállense todos que va a hablar el Ministro!. Ahí nomás subió el volumen al mango para que todos escucharan.
-Sr Ministro, le preguntó el cronista, ¿qué opina de la situación del país?
-Le agradezco su pregunta. Realmente estamos muy conformes con nuestro gobierno. La pobreza está casi derrotada, la inflación no existe, hemos logrado abatir la desocupación, a la delincuencia la tenemos controlada y la deuda externa es cada vez menor.
Un aplauso cerrado invadió el boliche. Y fue así, que en forma resignada, Bolazo Reyes comentó:

-Con profesionales no se puede competir. La verdá que el Ministro nos ganó por goleada.